En esta ocasión, el número de agosto abre con un artículo sobre la arquitectura de paisaje –una de las profesiones que más se ha consolidado en los últimos años en la Facultad de Arquitectura de la UNAM– sobre un asunto histórico de singular importancia: el uso de la vegetación en las fiestas mexicas mencionadas por fray Bernardino de Sahagún en su obras etnográficas escritas en el s. XVI. El acucioso análisis es presenta- do por dos académicas de la misma Facultad, Andrea Rodríguez e Erika Miranda, quienes además de la incorporar la catalogación científica de las plantas mexicas –en latín y náhuatl– nos recuerdan la categoría de riesgo de especies en extinción, a fin de brindarnos un listado vegetal que pudiera utilizarse por sus colegas en sus diseños paisajísticos y así promover profesionalmente el rescate de aquellas especies que conformaban el paisaje indígena primigenio. El número continúa con un segundo artículo, proveniente de la Universidad de Paris 1, Francia, cuyo autor, Andrés Avila–estudiante de doctorado en aquella institución europea– aborda el interesante asunto de la traducción de textos fundamentales del urbanismo y el patrimonio –tanto a lengua francesa, como al español, y viceversa– una labor filológica impulsada por la reconocida investigadora Françoise Choay, quien ha sido un referente obligado para los estudiosos del entorno urbano en Europa y Latinoamérica. Por su parte, el tercer artículo proviene del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM, de la reconocida académica Martha Fernández, quien en esta ocasión aborda la historia de la “casa de las bóvedas” –edificio barroco construido en el s. XVII en la capital poblana– a partir de la hipótesis de que los modelos compositivos utilizados no procedían de los teóricos del siglo XVII –como fray Juan de Ricci y Guarino Guarini– sino de edificaciones románicas y góticas retomadas en la Nueva España por razones simbólicas, que perseguían la reconstrucción ideal del Templo de Salomón. En el siguiente artículo, Sonia Fuentes, académica de la USAC,nos expone la problemática de la gestión multidisciplinaria en la protección de la arquitectura del siglo XX en Guatemala, específicamente para el conjunto gubernamental denominado como Centro Cívico, propuesta innovadora donde se conjuntaron los valores arquitectónicos, urbanos, escultóricos y pictóricos de mediados del pasado siglo y que, afortunadamente, derivaron en 2014 con su declaratoria como Patrimonio Cultural de aquella nación hermana. El artículo siguiente de Berenice Aguilar, proviene de la Facultad de Arquitectura de la UNAM, aborda el patrimonio de los paisajes histórico-rurales a través de su ejemplificación en casos italianos, así como de las implicaciones positivas –ambientales, sociales, culturales y económicas– que tendría si se aplicase al paisaje rural de muchas zonas mexicanas, como por ejemplo, el de las chinampas en Xochimilco, prácticamente perdido en la actualidad. El sexto artículo, procedente de la Escuela Nacional Preparatoria de la UNAM, lo presenta Juan Carlos Téllez, quien expone el interesante contraste entre las cualidades plásticas de una obra construida y la opinión cotidiana de los usuarios a través de las encuestas cualitativas. A través del caso de estudio de una conocida obra hospitalaria del arquitecto Agustín Hernández Navarro –un género especialmente sometido a pro- fundos cambios médico-tecnológicos– cuyos usuarios poco saben de referencias formales precolombinas y de innovadoras soluciones constructivas, y por el contrario, se reducen a “sufrir” las ineficiencias del edificio, principalmente causadas por una mala gestión de las políticas públicas de la sanidad social mexicana. El séptimo y último artículo proviene de la Universidad Autónoma Metropolitana, con Fernando Minaya, quien aborda el panorama que actualmente brinda la reutilización de edificios en la Ciudad de México, una práctica comercial y gubernamental recurrente y creciente por sus grandes posibilidades comerciales y profesionales, donde el valor del suelo y construcción en las zonas centrales se ha incrementado considerablemente. Finalmente, y preparado por quien esto escribe, en la también arbitrada sección de Entrevista, se ofrece al especializado lector las atinadas reflexiones históricas, teóricas y críticas del arquitecto e historiador Ramón Gutiérrez, quien ha sido una figura central tanto en su natal Argentina, como entre los círculos intelectuales de Chile, Uruguay, Perú, Brasil, Venezuela, España, Portugal, Italia y México, por citar tan algunos de los principales países donde sus ideas han contribuido a la madurez del pensamiento cultural latinoamericano. En la sección Espacios, dirigida a incorporar la producción literaria escrita por arquitectos o urbanistas, se incluye en esta ocasión una serie de poesías de Federico Martínez –brillante egresado del Posgrado de la UNAM y profesor en varias universidades públicas y privadas– quien es un frecuente escritor de prosa, poesía y narrativa en varios ‘espacios’ literarios impresos y electrónicos, con una temática que vincula la arquitectura y las humanidades. El número cierra con dos reseñas bibliográficas, ambas provenientes de investigado- ras adscritas al INAH.8 Lydia Espinosa, de Nuevo León, realiza un análisis pormenorizado del reciente libro del Seminario de Arquitectura y Urbanismo del Septentrión Novohispano, un grupo académico liderado por Luis Arnal Simón y Diana Ramiro, quienes desde 1995 sesionan en el Posgrado de la UNAM y del cual ya habían arroja- do varios productos bibliográficos en años anteriores, pues se trata de un trabajo de investigación de largo aliento. También del mismo INAH, Araceli Peralta nos presenta las aportaciones del reciente libro de su colega Ethel Herrera sobre el Panteón Francés de la Piedad, un producto bibliográfico que viene a sumarse a sus investigaciones anteriores sobre el valor patrimonial de panteones y cementerios de la Ciudad de México, zonas perfectamente delimitadas que resguardan innumerables obras funerarias, las cuales lamentablemente se encuentran jurídicamente desprotegidas y a merced de intereses comerciales de marmolerías sin escrúpulos, solapadas por administraciones locales corruptas. Finalmente, debemos agradecer la colaboración artística de Luis Arnal Simón, destacado investigador en la UNAM, quien nos muestra una faceta como dibujante no por todos conocida, una serie de bocetos que robustecen la tradición en esta re- vista por mostrar las múltiples labores creativas de los profesores de esta Facultad de Arquitectura.
Ivan San Martín Córdova Editor
Enlace revista: http://www.revistas.unam.mx/index.php/aca
Contacto: [email protected] [email protected]